martes, 22 de julio de 2008

Huye de mi mente

Este es el primer poema de nueva creación, el primero después de "Sueños vetados". Espero que a alguien pueda gustarle. Es un compendio de las cosas que no forman parte de mi decálogo, lo que me hace seguir adelante, aunque sea a base de rechazarlo.

Huye de mi mente

Sueño, huye de mi mente tan cansada
No quiero tenerte en mi presencia
Quiero tener bien abierta la mirada
Soñar es propio de quien todo anhela

Ambición, huye de mi mente tan extraña
No quiero que marques mi camino
Ni que escribas el guión de mi destino
Si así he de pisar a mi camarada

Frío, huye de mi mente gélida y huraña
No quiero que me dejes inerte en el hielo
Bajo cero sólo soy una estatua tan extraña
El sol brilla y me derrite y con él tocaré el cielo

Silencio, huye de mi mente tan ruidosa
No quiero más que una presencia necesaria
Que no sea excesiva, ni pueda ser otra cosa
Ni dibuje mi horizonte como un destino de paria

Odio, huye de mi mente tan cansada
De ver tantas barbaridades en tu nombre
Sal de nuestra vida, rompe la barrera
No vuelvas a verme ni grites mi nombre

Poder, huye de mi mente deseosa
De ver que haces y deshaces a tu antojo
No quiero ver de cerca tus fauces de lobo
Hambriento de devorar a otros lobos

Violencia, huye de mi mente tan hastiada
Ya sé que no hay fin que nada justifique
Ni medios para apoyar cuando se trata
De mancharme de sangre, ni el meñique

1 comentario:

Jorge P. Manrique dijo...

El "sueño" es ilusión y una belleza de la vida siempre que sea la antesala de la realidad.

La "ambición" sana, que no perjudique a los demás, y que sea simplemente una exigencia personal es la manera de seguir caminando en la senda de la vida.

El "frío" nos hace sentir la existencia de nuestros huesos dentro de la carne. Nos encoje sobre nosotros mismos.

El "silencio" buscado es a veces la más bella melodía. Un susurro del viento. Una caricia en el alma. Un momento de pausa e interiorización.

El "odio" es el condimento amargo de la sinrazón. Es la sutil impotencia de no saber encontrar el sentido correcto al momento. Es la equivocación de quien no sabe elegir.

El "poder" es la tiranía del que no sabe hablar. Es la amenaza de la fuerza. Es la cobardía del que teme ser vencido.

La "violencia" es el camino más erroneo. Es la más absurda de la elecciones. Es el paso que nos hace dejar de ser humanos. De mancharme de sangre... ni el meñique.