viernes, 29 de agosto de 2008

Puedo

¿No habéis tenido nunca la sensación de impotencia que produce no llegar a todo lo que os gustaría, de no poder hacer todo aquello que alguna vez habéis deseado? Una vez asumidas nuestras (infinitas) limitaciones, sólo puede quedar soñar con lo que nunca podremos hacer. E ironizar incluso con ello...

Puedo

Puedo detener el despertador
Pero no parar la luz del sol
Entrando por mi ventana
Radiante cada mañana

Puedo escuchar una canción
Pero no crear en mi corazón
La más bella melodía
Que jamás escuchar podría

Puedo comprar un diccionario
Pero no tener el conocimiento
La experiencia acumulada
Con el bagaje en mi espalda

Puedo pagar un billete de avión
Pero no volar con mis alas de cartón
Puedo hacerlo con mi corazón
Saltar de lado a lado sin vacilación

Puedo tener entre mis manos
El agua del mar, sumergirme en él
Pero no entender la creación
Del aire, la lluvia, el sol y la piel

4 comentarios:

Jorge P. Manrique dijo...

Mil millones y una vez más he tenido esa misma sensación. Pero más que una frustración por aquello que no podré hacer... es una sorpresa de lo infinita que es la vida y lo inabarcable que resulta la existencia.
La pequeñez de uno misma asumida es el inicio de la grandeza.

Según lo que yo entiendo (que será totalmente distinto de lo que tú expresas). En La primera estrofa, el despertador es el símbolo de la propia vida, de la cotidianidad, mientras que la luz del sol representa la existencia más allá de uno mismo. Así pues, tú puedes controlar tu reloj, pero no el reloj del mundo.
En el segundo párrafo no sé si con "crear en el corazón la más bella melodía" intentas reflejar una metáfora. En todo caso, si pienso que intentaría yo metaforizar con esa imagen... diría que es el "amor". Amor como la más bella melodía que nace del corazón. Supongo que no te refieres a eso... porque sería triste asumir la imposibilidad de crearlo.
Me gusta también el paralelismo que haces entre la posibilidad "fabricada" de volar en avión, y la posibilidad de volar con los sentidos que no son materiales.
Y de la última estrofa... me parece entender esa comparación entre el mar y el sentido de la creación. Mar inmenso como la creación... mar inabarcable... en el que uno se puede zambullir. "Tener entre mis manos el agua del mar, sumergirme en él"... como diciendo que coger algo de agua de mar entre las manos es una experiencia, pero que mucho más profundo es sumergirse en él. Como quien se acerca a una realidad y la toca, o se mete dentro de ella.

Bueno no sé... son elucubraciones... sin nada que ver con la realidad de lo que intentas contar. ¿O no?

Ánimo y adelante.

Anónimo dijo...

Puedes hacer todo aquello que imagines. Dale rienda suelta a tu pluma y a tu mente. Ánimo.
Un abrazo.

Inés Bohórquez (Ibo) dijo...

Creo que no solo puedes sino que también lo sientes.
Cada palabra dicha desde ese no creo poder es una manifestación de lo que si puedes crear,
cda frase creada que te lleva a la conclusión de lo que no eres esta intrinseca el si lo puedes hacer.

Somos lo que pensamos mi querido poeta somos ese sentimiento de realidad que creamos con cada palabra que decimos pensamos y actuamos...

Encantada de conocerte y de visitarte, ya vi que me tienes en los enlaces y gustosa te colo en los míos.

Te dejo un abrazo fuerte de bienvenida y mis bendiciones.

bye

Mi Ser dijo...

Las siluetas se reflejan a contra luz.... Mucho de lo que deseas con que se ha de reflejar?....

Mi Ser.