lunes, 15 de septiembre de 2008

Utopía


Hace casi dos décadas me invitaron a una boda e hice un verso que se quedó perdido en el tiempo y en la memoria. Hace poco lo rescaté y, tirando del hilo, hice un canto a la utopía, a la vida sin violencia. Porque sigo pensando que en este mundo las cosas irían mucho mejor con menos cañones y más amor.

Utopía

Hago un canto a la utopía
A un deseo incomprendido
El de pasar por la vida
Sin violencia y con sentido

Utopías que se cumplen
Deseos que no se hacen
Realidad en esta cumbre
Esta cumbre donde yacen

Donde yacen mis ideas
Mi utopía irrealizable
Un sueño que no se cumple
Un deseo que no se hace

Que realidad no se vuelve
La utopía es tan ajena
Que nunca se cumplirá
No tendré las manos llenas

De paz, de nuevos valores
Lejos de leyes humanas
Que sólo disparen flores
Que nunca disparen balas

En este mundo las cosas
Irían mucho mejor
Si en vez de tantos cañones
Pusiéramos más amor

Amor entre hermanos antes
Y después de la batalla
Que el cariño nunca falte
Que no sobre la esperanza

Hago un canto a la utopía
A mi deseo incumplido
Canto al sueño de vivir
Sin violencia y con sentido

1 comentario:

Anónimo dijo...

Una bella palabra.
UTOPÍA. Se llena la boca al nombrarla.
Ojalá nos la tatuásemos todos en el cuerpo.
Sigue la tuya y un gran poema, crack. Hasta pronto.